jueves, 28 de julio de 2016

LETANIAS A SANTA ANA

LETANÍAS DE SANTA ANA






-Señor, ten piedad de nosotros. (Señor, ten piedad de nosotros)

-Cristo, ten piedad de nosotros.

-Señor, ten piedad de nosotros.

-Cristo, óyenos.

-Cristo, escúchanos.

-Dios Padre celestial, (Ten piedad de nosotros)

-Dios Hijo Redentor del mundo,

-Dios Espíritu Santo,

-Trinidad Santa, un solo Dios,


-Señora Santa Ana, (Ruega por nosotros)

-Santa Ana, abuela de Nuestro Señor Jesucristo,

-Santa Ana, Madre de María Siempre Virgen,

-Santa Ana, esposa dignísima de San Joaquín,

-Santa Ana, suegra del santo patriarca, el Señor San José,

-Santa Ana, arca de alianza,

-Santa Ana, monte de Horeb,

-Santa Ana, raíz de José,

-Santa Ana, descendiente de estirpe real,

-Santa Ana, alegría de los Ángeles,

-Santa Ana, hija de los Patriarcas,

-Santa Ana, oráculo de los Profetas,

-Santa Ana, gloria de los Santos,

-Santa Ana, alegría de los Sacerdotes y Levitas,

-Santa Ana, nube resplandeciente,

-Santa Ana, llena y colmada de gracias,

-Santa Ana, modelo de bendición,

-Santa Ana, modelo de devoción,

-Santa Ana, modelo acabado de paciencia,

-Santa Ana, fortaleza de La Iglesia,

-Santa Ana, refugio de todos los pecadores,

-Santa Ana, protectora de los cristianos,

-Santa Ana, alivio y consuelo de los afligidos,

-Santa Ana, madre ternísima de las viudas,

-Santa Ana, maestra y dechado de Las vírgenes,

-Santa Ana, protectora eficaz de los navegantes,

-Santa Ana, especialísima abogada de sus devotos,

-Santa Ana, luz y refugio de cuantos la invocan,

-Santa Ana, protectora y aliento de todos los fieles,



-Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, (Perdónanos, Señor)

-Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, (Escúchanos, Señor)

-Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, (Ten piedad de nosotros)


-Señor, ten piedad de nosotros.

-Cristo, compadécete de nosotros.























lunes, 25 de julio de 2016

SANTO ROSARIO MEDITADO

El Rosario Bíblico Meditado tiene su inspiración en la forma en que este se rezaba en la edad media occidental entre los años 1425 a 1525. En aquellos tiempos era costumbre recitar un pequeño pensamiento o meditación sobre la vida de Jesús y María antes de rezar cada una de las avemarías. El Rosario Bíblico Meditado sigue esta manera de rezar el rosario. Toma su nombre del hecho de que casi en su totalidad las meditaciones proceden de las Sagradas Escrituras. Su principal característica es que en él las meditaciones están ordenadas de tal manera que con cada cuenta del rosario se va desarrollando paso a paso el contenido del misterio en cuestión. Es por tanto, una forma fácil de mantener la presencia de cada misterio al tiempo que se van desgranando cada una de las diez avemarías.
















ORACIONES INICIALES


" Oh Dios, cuyo Unigénito con su vida, muerte y resurrección nos mereció el premio de la eterna salvación: concédenos, te rogamos, que meditando estos misterios en el sacratísimo Rosario de la Virgen Santa María, imitemos lo que contienen, y alcancemos lo que prometen. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor. Amén "


Oración para ser rezada por los Guardias de Honor del Sagrado Corazón 

“Haz que arda y crezca en mi siempre tu amor, Corazón de mi amable Salvador.”


Fórmula breve de consagración de los Esclavos de María, para todos los días.

"¡Oh María Inmaculada, buenísima Soberana mía, cómo me regocijo en ser vuestro esclavo de Amor! Os entrego y consagro mi cuerpo y mi alma, con todos mis bienes interiores y exteriores, naturales y sobrenaturales, pasados, presentes y futuros. Quiero también en este día ganar cuantas indulgencias pueda y os las entrego. ¡Mi queridísima Madre!, renuncio a mi propia voluntad, a mis pecados, disposiciones e intenciones; quiero lo que Vos queréis; me arrojo en vuestro Corazón abrazado de amor, divino molde en el que debo formarme, y en él me escondo y me pierdo para rogar, obrar y sufrir siempre por Vos y con Vos, a la mayor gloria de vuestro divino Hijo, Jesús. Amén."




Confiteor

CONFITEOR Deo omnipotenti, beatae Mariae semper Virgini, beato Michaeli Archangelo, beato Ioanni Baptistae, sanctis Apostolis Petro et Paulo, omnibus Sanctis et tibi Pater quia peccavi nimis cogitatione, verbo et opere: mea culpa, mea culpa, mea maxima culpa. Ideo precor beatam Mariam semper Virginem, beatum Michaelem Archangelum, beatum Ioannem Baptistam, sanctos Apostolos Petrum et Paulum, omnes sanctos, et te Pater, orare pro me ad Dominum Deum nostrum. Amen.

Símbolo Niceno Constantinopolitano 

CREDO in unum Deum Patrem omnipotentem, factorem caeli et terrae visibilium ómnium et invisibilium. Et in unum Dominum Iesum Christum, Filium Dei unigenitum. Et ex Patre natum ante omnia saecula. Deum de Deo, lumen de lumine, Deum verum de Deo Vero, Genitum, non factum, consubstantialem Patri; perquem omnia facta sunt. Qui propter nos homines et propter nostram salutem descendit de caelis, (GenaflectiturET INCARNATUS EST DE SPIRITU SANCTO EX MARIA VIRGINE ET HOMO FACTUS EST. Crucifixus etiam pro nobis; sub Pontio Pilato passus et sepúltus est. Et resurrexit tertia die, secundum Scripturas. Et ascendit in caelum: sedet ad dexteram Patris. et iterum venturus est  cum gloria  iudicare vivos et mortuos: cuius regni non erit finis. Et in Spiritum Sanctum, Dominum  et vivificantem: qui ex Patre Filioque procedit. Qui cum Patre et Filio simul adoratur et conglorificatur, qui locutus est per Prophetas, Et unam sanctam catholicam et apostolicam Ecclesiam, Confiteor unum baptisma in remissionem peccatorum. Et exspecto resurrectionem mortuorum  Et vitam + venturi saeculi, Amen.















MISTERIOS GLORIOSOS


Mysteria gloriosa (Misterios gloriosos: miércoles, sábado y domingo)





1º LA RESURRECCIÓN DEL SEÑOR

Primo, Dómini Nóstri Iésu Chrísti resurrectiónem contemplamur, et fídes pétitur.
Pater Noster

1. Yo os aseguro que lloraréis y os lamentaréis, y el mundo se alegrará. Estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en gozo. (Jn. 16, 20).Avemaría.

2. También vosotros estáis tristes ahora, pero volveré a veros y se alegrará vuestro corazón y nadie os podrá quitar vuestra alegría. (Jn. 16, 22).Avemaría.

3. El primer día de la semana, muy de mañana, llegaron al sepulcro llevando los aromas que habían preparado. (Lc. 24, 1). Avemaría.

4. De pronto hubo un gran terremoto, pues un Angel del Señor bajó del cielo, se acercó, hizo rodar la piedra del sepulcro y se sentó en ella. (Mt. 28, 2). Avemaría.

5. No temáis, pues sé que buscáis a Jesús, el crucificado. (Mt. 28, 5). Avemaría.

6. No está aquí: resucitó como dijo. Venid y ved el sitio donde estaba. (Mt. 28, 6). Avemaría.

7. Y va delante de vosotros a Galilea. Allí le veréis. (Mt. 28, 7). Avemaría.

8. Ellas se alejaron a toda prisa del sepulcro, y con temor y gran alegría corrieron a llevar la noticia a los discípulos. (Mt. 28, 8). Avemaría.

9. Yo soy la Resurrección y la Vida. El que cree en Mí, aunque muera, vivirá. (Jn. 11, 25). Avemaría.

10. Y todo el que vive y cree en Mí, no morirá jamás. (Jn. 11,26). Avemaría.

Gloria Patri...
* * *




2º. LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR

Secundo, Dómini Nóstri Iésu Chrísti in cælum ascensiónem contemplamur, et spes pétitur.
Pater Noster

1. Los llevó después afuera hasta cerca de Betania; y, levantando la mano, les dio su bendición. (Lc. 24, 50). Avemaría.

2. Me ha sido dado todo poder en el Cielo y en la tierra. (Mt. 28, 18). Avemaría.

3. Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes. (Mt. 28, 18). Avemaría.

4. Bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. (Mt. 28, 19). Avemaría.

5. Y enseñadles a observar todo cuanto yo os he mandado. (Mt. 28, 20). Avemaría.

6. El que crea y se bauticé, se salvará. (Mc. 16, 16). Avemaría.

7. Pero el que no crea, se condenará. (Mc. 16, 16). Avemaría.

8. Y mirad, Yo estaré siempre con vosotros hasta el fin del mundo. (Mt. 82, 20). Avemaría.

9. Y, en tanto que los bendecía, se apartó de ellos y fue elevándose al Cielo. (Lc. 24, 51). Avemaría.

10. Y allí está sentado a la diestra de Dios. (Mc. 16, 19). Avemaría.

Gloria Patri...
* * *




3º. LA VENIDA DEL ESPÍRITU SANTO

Tertio, Spíritus Sáncti descensiónem contemplamur, et cháritas ad Deum pétitur.
Pater Noster

1. Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo local. (Hch. 2, 1). Avemaría.

2. Y se oyó de repente un estruendo, que venía del cielo, como de una ráfaga de viento que sopla con furia. (Hch. 2, 2). Avemaría.

3. Y aparecieron unas como lenguas de fuego, que se repartieron y posaron sobre cada uno de ellos. (Hch. 2, 3). Avemaría.

4. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en lenguas extrañas, según el Espíritu Santo les movía a expresarse. (Hch. 2, 4). Avemaría.

5. Había en Jerusalén judíos que allí residían, hombres piadosos, venidos de todas las naciones que hay bajo el cielo. (Hch. 2, 5). Avemaría.

6. Entonces Pedro, en pie con los once, alzó su voz y les dirigió estas palabras. (Hch. 2, 14). Avemaría.

7. Arrepentíos y que cada uno de vosotros se bautice en el nombre de Jesucristo para remisión de vuestros pecados; y recibiréis entonces el don del Espíritu Santo. (Hch. 2, 38). Avemaría.

8. Y los que acogieron su palabra se bautizaron, y se agregaron aquel día unas tres mil almas. (Hch. 2,41). Avemaría.

9. Envías tu soplo y son creados, y renuevas la faz de la tierra. (Sal. 104, 30). Avemaría.

10. Ven, ¡oh Espíritu Santo!, llena los corazones de tus fieles; y enciende en ellos el fuego de tu Amor. Aleluya. (Secuencia de Pentecostés).Avemaría.

Gloria Patri...
* * *




4º. LA ASUNCIÓN DE MARÍA SANTÍSIMA

Quarto, Beátæ Maríæ Vírginis in cælum assumptiónem contemplamur, et bene moriéndi gratia pétitur.
Pater Noster

1. Bendita seas Tú, hija del Dios Altísimo, entre todas las mujeres de la tierra. (Jdt. 13, 18). Avemaría.

2. La confianza que has demostrado no se borrará del corazón de los hombres. (Jdt. 13, 19). Avemaría.

3. Que Dios te conceda para exaltación perpetua el ser favorecida con todos los bienes, porque no vacilaste en exponer tu vida a causa de la humillación de nuestra raza. (Jdt. 13, 20). Avemaría.

4. Tú eres la exaltación de Jerusalén, Tú el gran orgullo de Israel, Tú la suprema gloria de nuestra raza. (Jdt. 15, 9). Avemaría.

5. Escucha, hija, mira y pon atento oído: el Rey está prendado de tu belleza. (Sal. 35; 11, 12). Avemaría.

6. Entonces se abrió el templo de Dios que está en el cielo, y hubo relámpagos, y estrépito, y truenos. (Ap. 11, 19). Avemaría.

7. Apareció una grandiosa señal en el cielo: una Mujer vestida del sol. (Ap. 12, 1). Avemaría.

8. Con la luna bajo sus pies, y con una corona de doce estrellas en la cabeza. (Ap. 12, 1). Avemaría.

9. Toda espléndida, la Hija del Rey, va adentro con vestido en oro recamado. (Sal. 45, 14). Avemaría.

10. Cantad al Señor un canto nuevo, porque ha hecho maravillas. (Sal. 98, 1). Avemaría.

Gloria Patri...
* * *





5º. LA CORONACIÓN DE MARÍA SANTÍSIMA

Quinto, Beátæ Maríæ Vírginis coronatiónem contemplamur, et fidúcia in María Regína Nostra pétitur
Pater Noster

1. ¿Quién es ésta que surge cual aurora, bella como la luna, refulgente como el sol?. (Cant. 6, 10). Avemaría.

2. Como flor del rosal en primavera, como lirio junto al manantial; como brote del Líbano en verano, como fuego e incienso en el incensario; como vaso de oro macizo adornado de toda clase de piedras preciosas. (Eclo. 50, 8-9). Avemaría.

3. Yo soy la Madre del Amor hermoso, del temor, del conocimiento, y de la santa esperanza. (Eclo. 24, 24). Avemaría.

4. En mi está toda gracia de camino y de verdad; en mi toda esperanza de vida y de virtud. (Eclo. 24, 25). Avemaría.

5. Venid a mi los que me deseáis y hartaos de mis frutos. (Eclo. 24, 26). Avemaría.

6. Que mi recuerdo es más dulce que la miel; mi heredad mas dulce que panal de miel. (Eclo. 24, 27). Avemaría.

7. Ahora, pues, hijos, escuchadme, escuchad la instrucción y haceos sabios, no la despreciéis. (Prov. 8, 32-33). Avemaría.

8. Dichosos los que guardan mis caminos. Dichoso el hombre que me escucha velando ante mi puerta cada día. (Prov. 8, 33-34). Avemaría.

9. Porque el que me halla, ha hallado la Vida, ha logrado el Favor del Señor. (Prov. 8, 35). Avemaría.

10. Salve, oh Reina de la Misericordia, líbranos del enemigo, y recíbenos en la hora de la muerte. (Gradual M. de B. V M). Avemaría.

Gloria Patri...













MISTERIOS GOZOSOS

 Mysteria Gaudiosa (Misterios gozosos: lunes y jueves )




1º LA ANUNCIACIÓN

Primo, Beátæ Maríæ Vírginis anuntiatiónem contemplámur, et humílitas pétitur.

Pater Noster


1. El Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una Virgen (...) y el nombre de la Virgen era María. (Lc. 1,26- 27). Avemaría.

2. Alégrate, llena de gracia, el Señor es contigo. Bendita Tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre. (Lc. 1, 28, 42). Avemaría.

3. Ella se turbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. (Lc. 1, 29). Avemaría.

4. El Ángel le dijo: no temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios. (Lc. 1, 30). Avemaría.

5. Concebirás y darás a luz un hijo, al que pondrás por nombre Jesús. (Lc. 1, 31). Avemaría.

6. El será grande y será llamado Hijo del Altísimo; y su Reino no tendrá fin. (Lc. 1; 32, 33). Avemaría.

7. María dijo al Ángel: ¿cómo será esto, pues no conozco varón?. (Lc. 1, 34). Avemaría.

8. El Espíritu Santo descenderá sobre Ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. (Lc. 1, 35). Avemaría.

9. Por eso el Hijo, en Ti engendrado, será Santo, será Hijo de Dios. (Lc. 1, 35). Avemaría.

10. He aquí la esclava del Señor; hágase en mi según tu palabra. (Lc. 1, 38). Avemaría.

Gloria Patri...
* * *




2º. LA VISITACIÓN

Secundo, Beátæ Maríæ Vírginis visitatiónem contemplámur, et charitas ad fratres pétitur.

Pater Noster


1. En aquellos días, se levantó María y se fue con prontitud a la región montañosa; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. (Lc. 1, 39-40).Avemaría.

2. Y en cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el Niño en su seno, e Isabel quedó llena del Espíritu Santo. (Lc. 1, 41). Avemaría.

3. Y en alta voz exclamó: ¡Bendita Tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre!. (Lc. 1, 42). Avemaría.

4. Bienaventurada Tú que has creído, porque tendrán cumplimiento en Ti las promesas que se han hecho de parte del Señor. (Lc. 1, 45). Avemaría.

5. Entonces María dijo: mi alma glorifica al Señor y mi espíritu se regocija en Dios, mi Salvador. Porque ha puesto sus ojos en la pequeñez de su esclava. (Lc. 1, 46-48). Avemaría.

6. Mirad: ya desde ahora me aclamarán bienaventurada todas las generaciones. Porque ha obrado en mi cosas estupendas Aquél que es poderoso. (Lc. 1, 48, 49). Avemaría.

7. Santo es su Nombre y su misericordia alcanza en generaciones a los que le temen. (Lc. 1, 49-50). Avemaría.

8. Después la fuerza de su brazo dispersó a los que son soberbios en su propio corazón. (Lc. 1, 51). Avemaría.

9. Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes. (Lc. 1, 52). Avemaría.

10. A los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada. (Lc. 1, 53). Avemaría.

Gloria Patri...
* * *




3º. LA NATIVIDAD DEL SEÑOR

Tertio, Dómini Nóstri Iésu Chrísti nativitátem contemplámur, et paupertátis spíritus pétitur.

Pater Noster


1. Encontrándose allí, le llegó el tiempo de su alumbramiento. (Lc. 2,6). Avemaría.

2. Y dio a luz a su Hijo primogénito, y lo envolvió en pañales. (Lc. 2, 7). Avemaría.

3. Y lo acostó en un pesebre porque no había sitio para ellos en la posada. (Lc. 2, 7). Avemaría.

4. Había en la misma comarca algunos pastores, que dormían al raso y vigilaban por turno durante la noche su rebaño. Se les presentó el Ángel del Señor y la gloria del Señor los envolvió en su luz. (Lc. 2, 8-9). Avemaría.

5. No temáis, pues os anuncio una gran alegría, que lo será para todo el pueblo. (Lc. 2, 10). Avemaría.

6. Os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es el Cristo Señor. (Lc. 2, 11). Avemaría.

7. Gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres que El ama. (Lc. 2, 14). Avemaría.

8. Unos magos de Oriente se presentaron, entraron en la casa, y vieron al niño con María, su Madre. (Mt. 2; 1, 11). Avemaría.

9. Y postrándose, lo adoraron; abrieron sus tesoros y le ofrecieron dones: oro, incienso y mirra. (Mt. 2, 11). Avemaría.

10. María, por su parte, guardaba todas estas cosas, y las meditaba en su corazón. (Lc. 2, 19). 
Avemaría.


Gloria Patri...
* * *




4º. LA PRESENTACIÓN DE JESÚS EN EL TEMPLO

Quarto, Dómini Nóstri Iésu Chrísti presentatiónem in templo contemplámur, et obediéntia pétitur.

Pater Noster


1. Cuando se cumplieron los días de la purificación, según la Ley de Moisés, lo subieron a Jerusalén para ofrecerlo al Señor. Lc. 2, 22). Avemaría.

2. Había entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, justo piadoso, que esperaba la consolidación de Israel. (Lc. 2, 25). Avemaría.

3. El Espíritu Santo le había revelado que no moriría sin ver al Cristo del Señor (Lc. 2, 26). Avemaría.

4. Movido por el Espíritu vino al Templo; y, cuando los padres introdujeron al Niño Jesús, para cumplir lo que la Ley prescribía sobre El, le tomó en brazos y bendijo a Dios. (Lc. 2, 27-28). Avemaría.

5. Ahora, Señor, puedes dejar a tu siervo ir en paz, según tu palabra. (Lc. 2, 29). Avemaría.

6. Porque han contemplado mis ojos tu salvación, la que has puesto a la vista de todos los pueblos. (Lc. 2, 30-31). Avemaría.

7. Luz para iluminar a los gentiles y gloria de tu pueblo Israel. (Lc. 2, 32). Avemaría.

8. Y se dirigió a María, la Madre del Niño, para decirle: Este está predestinado por Dios para ruina o resurgimiento de muchos en Israel, y será signo de contradicción. (Lc. 2, 34). Avemaría.

9. Tu misma alma quedará atravesada por una espada, para que se ponga de manifiesto la actitud que ante El adopta cada uno. (Lc. 2, 35).Avemaría.

10. Después que hubieron cumplido todo lo prescrito en la Ley del Señor, regresaron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño crecía y se desarrollaba, llenándose de sabiduría; y sobre El se manifestaban las complacencias de Dios. (Lc. 2, 39-40). Avemaría.

Gloria Patri...
* * *




5º. LA PÉRDIDA DEL NIÑO JESÚS 
Y SU HALLAZGO EN EL TEMPLO

Quinto, Dómini Nóstri Iésu Chrísti inventiónem in templo contemplámur, et Déum inquæréndi volúntas pétitur

Pater Noster


1. Cuando (Jesús) tuvo doce años, subieron ellos (a Jerusalén) como de costumbre a la fiesta. (Lc. 2, 42). Avemaría.

2. Y pasados los días, al regresar ellos, el Niño Jesús se quedó en Jerusalén sin que sus padres se dieran cuenta. (Lc. 2: 43). Avemaría.

3. Y al no dar con Él, se volvieron a Jerusalén, sin dejar de buscarlo. Al cabo de tres días lo hallaron en el Templo. (Lc. 2, 45-46). Avemaría.

4. Sentado en medio de los doctores, escuchándoles y haciendo a la vez sus preguntas. (Lc. 2, 46). Avemaría.

5. Todos los que le escuchaban estaban asombrados de su talento y de las respuestas que daba. (Lc. 2, 47). Avemaría.

6. Hijo mío, ¿por qué te has portado así con nosotros? Tu padre y yo te buscábamos llenos de angustia. (Lc. 2, 48). Avemaría.

7. ¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debo ocuparme en los asuntos de mi Padre?. (Lc. 2, 49). Avemaría.

8. Pero ellos no comprendieron el alcance de sus palabras. (Lc. 2, 50). Avemaría.

9. Descendió Jesús con ellos, fue a Nazaret y les estaba sumiso. (Lc. 2,51). Avemaría.

10. Jesús crecía en sabiduría, en edad y en gracia delante de Dios y de los hombres. (Lc. 2, 52). Avemaría.

Gloria Patri...